LOS HIJOS DE ADAPA Y TITI
En cierta ocasión, mientras paseaba por el río, dos doncellas Terrestres cautivaron mi capricho,
por ellas, de mi simiente, fueron concebidos Adapa y Titi,(adan y eva )
una nueva clase de Terrestres, un Hombre Civilizado, se trajo de este modo a la Tierra;
nuestro rey, Anu, tenía dudas de si serían capaces de procrear, con el nacimiento de Ka-in y de Abael, Anu y el consejo en Nibiru se convencieron.
En cierta ocasión, mientras paseaba por el río, dos doncellas Terrestres cautivaron mi capricho,
por ellas, de mi simiente, fueron concebidos Adapa y Titi,(adan y eva )
una nueva clase de Terrestres, un Hombre Civilizado, se trajo de este modo a la Tierra;
nuestro rey, Anu, tenía dudas de si serían capaces de procrear, con el nacimiento de Ka-in y de Abael, Anu y el consejo en Nibiru se convencieron.
Una nueva fase de la presencia Anunnaki en este planeta fue bienvenida y aprobada;
ahora que Abael ha sido asesinado, y si a Ka-in se le extingue también,
¡la saciedad llegará a su final, los motines se repetirán, todo lo que se ha
conseguido se desmoronará!
No es de sorprender que le tomaras cariño a Abael, ¡era el hijo de tu hermanastro!
Ahora, ten piedad del otro, ¡deja que sobreviva el linaje de Adapa! Este secreto le reveló Enki a Marduk con tristeza.
Al principio, Marduk se sorprendió con la revelación, después se vio vencido por la risa: De tus proezas haciendo el amor mucho se ha rumoreado, ¡ahora estoy
convencido de ello!
¡Perdónese la vida de Ka-in, que se le destierre a los confines de la Tierra! Así le dijo Marduk a su padre, cambiando de la ira a la risa. En Eridú, Enki pronunció la sentencia sobre Ka-in: ¡Ka-in debe partir hacia el este, a una tierra por la que errará por su mala
acción,
pero su vida debe ser perdonada, a él y a sus generaciones se les distinguirá!
Ningishzidda alteró la esencia vital de Ka-in:
Ninghishzidda cambió la esencia vital de Ka-in para que en su cara no creciera la barba.como es eso posible de hacer ese esperimento,tomaron a Ka-in lo llevaron a una camara y le modificaron una letra de su ADN Con su hermana Awan como esposa, Ka-in partió del Edin, a la Tierra de
Errar se encaminó.
Entonces, los Anunnaki se sentaron y se preguntaron entre sí: Sin Abael, sin Ka-in, ¿quién hará crecer el cereal y hará pan para nosotros, quién será el pastor, las ovejas multiplicará, de lana para ropa proveerá? ¡Que por Adapa y Titi haya más proliferación! Así dijeron los Anunnaki. Con la bendición de Enki, Adapa conoció una y otra vez a su esposa Titi; una hija, otra hija, cada vez, una y otra vez nacían. En el nonagésimo quinto Shar, Adapa y Titi tuvieron finalmente un hijo; Sati, El Que Ata la Vida de Nuevo, le llamó Titi; por él se contaron las
generaciones de Adapa.
En total, treinta hijos y treinta hijas tuvieron Adapa y Titi, Adan y Eva porque no estan en la geneologia biblica las mujeres de ellos, hubo labradores de la tierra y pastores que trabajaron para los
Anunnaki, por ellos volvió la saciedad a los Anunnaki y a los Terrestres Civilizados.
En el nonagésimo séptimo Shar, a Sati le nació un hijo de su esposa Azura.
Se le anotó en los anales con el nombre de Enshi; Maestro de la Humanidad significaba su nombre.
Adapa, su padre, le hizo comprender la escritura y los números,
y Adapa le contó a Enshi quiénes eran los Anunnaki y todo sobre Nibiru.
Los hijos de Enlil le llevaron a Nibru-ki; le enseñaron secretos de los Anunnaki.
Nannar, el mayor en la Tierra de Enlil, le mostró el modo de los ungüentos perfumados,
Ishkur, el más joven de Enlil, le enseñó a preparar el elixir de los frutos Inbu.
Fue a partir de entonces que los Anunnaki fueron llamados señores por el Hombre Civilizado.
Y fue el comienzo de los ritos de culto de los Anunnaki.
Después, Enshi tuvo un hijo con su hermana Noam;
Kunin, El de los Hornos, significaba su nombre.
Su tutor fue Ninurta, en Bad-Tibira aprendió de hornería y de hornos,
se le enseñó cómo hacer fuegos con betunes, cómo fundir y refinar;
en la fundición y el refinado del oro para Nibiru trabajaron él y sus descendientes.
En el nonagésimooctavo Shar ocurrió todo esto.
Viene ahora el relato de las generaciones de Adapa después de que fuera
exiliado Ka-in,
y de los viajes celestiales de Enkime y de la muerte de Adapa. En el nonagésimonoveno Shar le nació un hijo a Kunin, por Mualit, hermanastra de Kunin, fue concebido. Malalu, El Que Interpreta, le nombró ella; sobresalía en música y en canto. Para él hizo Ninurta un arpa con cuerdas, conformó una flauta para él;
Malalu interpretaba himnos a Ninurta; junto con sus hijas, los cantaba ante Ninurta.
La esposa de Malalu era la hija del hermano de su padre, Dunna era su nombre.
En el centesimo Shar desde que comenzara la cuenta en la Tierra,
les nació un hijo a Malalu y a Dunna, era su primogénito;
Irid, El de las Aguas Dulces, le llamó su madre Dunna. '
Dumuzi le enseñó cómo excavar pozos, cómo proveer de agua a los rebaños en distantes praderas.
Fue allí, junto a los pozos en las praderas, que pastores y doncellas se reunieron,
donde los desposorios y la proliferación de la Humanidad Civilizada abundó sobremanera.
En sus días, los Igigi venían con más frecuencia a la Tierra. Para observar y ver, los cielos poco a poco abandonaron, vigilar y ver lo que ocurría en la Tierra deseaban cada vez más; Enki le suplicó a Marduk que estuviera con ellos en Lahmu, vigilar y ver lo que ocurría en la Tierra deseaba Marduk fervientemente. En un pozo, en las praderas, se encontró Irid con su esposa; Baraka era su nombre, era la hija del hermano de su madre. A la conclusión del centesimo segundo Shar, les nació un hijo, con el nombre de Enki-Me, por Enki ME Comprensión, se le llamó en los
anales.
Era sabio e inteligente, comprendió con rapidez los números. Tenía mucha curiosidad por los cielos y por todas las materias celestiales. El señor Enki le tomó cariño, él le contó los secretos que una vez le revelara a Adapa.
De la familia del Sol y de los doce dioses celestiales le enseñó Enki, y de cómo los meses se contaban por la Luna y los años por el Sol, y de cómo se contaban los Shars por Nibiru, y de cómo Enki combinaba
las cuentas,
de cómo el señor Enki había dividido el círculo de los cielos en doce partes, de cómo había asignado Enki una constelación a cada una, doce estaciones en un gran círculo había dispuesto, de cómo, para honrar a los doce grandes líderes Anunnaki, había puesto
nombres a las estaciones.
Enkime ansiaba explorar los cielos; hizo dos viajes celestiales. Y éste es el relato de los viajes de Enkime a los cielos,
y de cómo dio comienzo Marduk a los matrimonios mixtos y a los problemas con los Igigi.
Se envió a Enkime para que estuviera con Marduk en el Lugar de Aterrizaje,
desde allí, Marduk se lo llevó en una nave espacial hasta la Luna.si lo llevo a la luna es por que hay una estacion de vigilancia un telescopio satelites etc uno puede imaginar y alimento personal de apoyo muchas cosas quedaron alla porque sabian que los humanos no iriamos en muchos años
Allí, Marduk le enseñó a Enkime lo que había aprendido de su padre, Enki.
Cuando( Enkime este era humano volvió a la Tierra,) se le envió para que estuviera con Utu en Sippar, el Lugar de los Carros.
Allí, Utu le dio a Enkime una tablilla para escribir lo que estaba aprendiendo,
Utu lo instaló en su brillante morada como un Príncipe de los Terrestres. Le enseñó los ritos, para comenzar con las funciones del sacerdocio. Enkime residía en Sippar, con su esposa Edinni, una hermanastra, a ellos les nació un hijo en el centesimo cuarto Shar,
Matushal le llamó su madre, El Que se Elevó por las Brillantes Aguas significaba su nombre.
Fue después de eso que Enkime hizo su segundo viaje a los cielos, esta vez también fue Marduk su mentor y compañero.
En un carro celestial se remontaron hacia el cielo, hacia el Sol y más allá de él hicieron un círculo.
Marduk se lo llevó para visitar a los Igigi, en Lahmu,
los Igigi le tomaron cariño, de él aprendieron sobre los Terrestres Civilizados.
De él se dice en los Anales que partió hacia los cielos,
que en los cielos se quedó hasta el final de los días.
Antes de que Enkime partiera hacia los cielos, de todo lo que en los cielos se le había enseñado,
hizo un registro por escrito Enkime, para que sus hijos lo supieran lo escribió;
tomó nota de todo lo que hay en los cielos en la familia del Sol, y de las regiones de la Tierra y sus tierras y sus ríos también. Confió sus escritos en manos de Matushal, su primogénito,
para que, junto con sus hermanos Ragim y Gaidad, los estudiara y se atuviera a ellos.
En el centesimo cuarto Shar había nacido Matushal,
él fue testigo de los problemas de los Igigi y de lo que Marduk había hecho.
A Matushal le nació un hijo de su esposa Ednat, Lu-Mach, Hombre
Poderoso, fue su nombre. En sus días, las condiciones sobre la Tierra se hicieron más difíciles; en los
campos y las praderas, los trabajadores se quejaban. Los Anunnaki designaron a Lu-Mach como capataz, para hacer cumplir
las cuotas, para reducir las raciones. En sus días fue cuando a Adapa le llegó la hora de morir; y cuando Adapa supo que sus días habían llegado a su fin, ¡Que todos mis hijos y los hijos de mis hijos se reúnan ante mí!, dijo. Para que antes de que yo muera pueda bendecirles, y les hable antes de morir. Y cuando Sati y los hijos de los hijos se habían reunido, ¿Dónde está Ka-in, mi primogénito?, les preguntó Adapa. ¡Id a buscarle!,
les dijo a todos ellos. Sati presentó el deseo de su padre ante el señor Enki, le preguntó al señor
qué hacer.
Entonces, Enki llamó a Ninurta: ¡Que el desterrado, de quien tú eras mentor, sea traído ante el lecho de muerte de Adapa!
Ninurta se subió en su Pájaro del Cielo, hasta la Tierra de Errar voló;
sobre las tierras deambuló, buscó desde los cielos a Ka-in.
Y cuando lo encontró, llevó a Ka-in hasta Adapa como sobre las alas de
un Águila. Cuando se le informó a Adapa de la llegada de su hijo, ¡Que vengan ante
mí Ka-in y Sati!, dijo Adapa. Los dos fueron ante su padre; Ka-in, el primogénito, a su derecha. Sati,
a su izquierda.
Y fallándole la visión a Adapa, para reconocer a sus hijos tocó sus rostros;
y el rostro de Ka-in, a la derecha, era imberbe, y el rostro de Sati, a la
izquierda, tenía barba.
Y Adapa puso su mano derecha sobre la cabeza de Sati, el de la izquierda,
y le bendijo y dijo: De tu simiente se llenará la Tierra, y de tu simiente,
como un árbol con tres ramas, la Humanidad sobrevivirá a una Gran
Calamidad.el diluvio osea el derretimiento de los polos que los anunnakis ya sabian
Y puso su mano izquierda sobre la cabeza de Ka-in, a su derecha, y le dijo: Por tu pecado, de tu derecho de nacimiento estás privado, pero de tu
simiente vendrán siete naciones,
en un reino aparte medrarán, tierras distantes habitarán;
pero por haber asesinado a tu hermano con una piedra, por una piedra llegará tu fin.
Y cuando Adapa terminó de decir estas palabras, dejó caer las manos, sus-
piró y dijo:
Llamad ahora a mi esposa Titi, y a todos los hijos y a todas las hijas,
y después de que mi espíritu me deje, llevadme al lugar en que nací, junto al río,
y enterradme con la cara hacia el Sol naciente.
Titi gritó como una bestia herida, cayó sobre sus rodillas al lado de Adapa.
Y los dos hijos de Adapa, Ka-in y Sati, envolvieron su cuerpo en una tela,
en una cueva que les mostró Titi, junto a las orillas del río, enterraron a Adapa.
En mitad del nonagésimotercer Shar había nacido, a finales del centesimo octavo murió.
Una larga vida para un Terrestre; pero no tenía el ciclo vital de Enki.
Y después de que Adapa fuera enterrado, Ka-in se despidió de su madre y
de su hermano.
Ninurta lo llevó de vuelta en su Pájaro del Cielo a la tierra de errar.
Y en un distante reino, Ka-in tuvo hijos e hijas,
y para ellos construyó una ciudad, y mientras la construía, la caída de una piedra le mató.
En el Edin, Lu-Mach sirvió a los Anunnaki como capataz,
en los días de Lu-Mach, Marduk y los Igigi se casaban con las Terrestres.